Cheng-Long Liu「
Apariencia[]
Liu tiene ojos castaños claros y cabello teñido de azul atado a un lado en una cola de caballo con dos cintas naranjas. Lleva un sombrero y un traje de granjero taiwanés, con un chaleco de exorcista encima. Lleva medias grises con un patrón de rayas blancas y grises en la parte inferior y calcetines blancos con zapatos negros curvados un poco hacia arriba en los extremos. Tiene guantes sin dedos y lleva un bastón Bō rojo como arma. Tiene un cinturón alrededor de la cintura con un signo de Yin-Yang en el medio. Al costado del cinturón hay un bolsillo largo donde guarda su bastón Bō después de doblarlo.
Personalidad[]
Liu es un exorcista tranquilo y sereno que se toma en serio su trabajo y critica a sus compañeros exorcistas por su incompetencia. Parece gustarle la seriedad y la actitud estoica de Yukio Okumura hacia su trabajo de exorcismo, que en este caso es similar a su personalidad. También desconfiaba ligeramente de Rin Okumura debido a que era hijo de Satán, al igual que otros exorcistas antes que él. También es una persona muy sarcástica y le dice a Yukio que quería quemar todo el país. También tiene la costumbre de andarse con rodeos durante las conservaciones, terminando con un "es broma" y volviendo a los temas principales.
Historia[]
Pasado[]

Liu en el pasado
Desde que era niño, Liu fue entrenado con dureza y tenacidad para eliminar a los demonios sin piedad, puesto que su familia acabó mal por juzgar la naturaleza de los demonios. Cuando se volvió un exorcista, la familia de Liu intentó usarlo para recuperar el liderazgo de su clan, el cual fue tomado por Lucy Yang, a quien consideraron una vil traidora. No obstante, cuando Liu conoció a Lucy, entendió que su familia estaba equivocada y decidió seguir los pasos de la anciana.
Blue Exorcist: La Película[]
Arco Sinigual[]

Liu apoya a Lucy
Liu forma parte del ejército de supresión de Satán, organizado por Mephisto Pheles para hacer frente al Dios Demonio que encarnó en un cuerpo humano. Cuando Lucy Yang es atacada por Satán, Liu y otros miembros de la Sede de Taiwán se hacen cargo de cuidarla mientras Osceola Redarm y Rin regresan a la batalla. Al verla herida, Liu expresa que su abuela es muy terca para morir todavía. Más adelante, Liu y Lucy regresan al combate contra el Dios Demonio, en donde Liu apoya a su abuela mientras ésta lo ataca con sus Garras Negras.

Los adultos hablan del futuro
En medio de la calamidad producida por Satán, Liu atestigua como el Dios Demonio se lanza en búsqueda de un nuevo recipiente que pudiera contener su inmenso poder y empieza a corroer la Tierra. Mientras que muchos exorcistas se retiran y regresan con sus familias, otros, entre ellos Liu, se quedan y arriesgan su vida participando en la batalla final contra la fortaleza de Satán. Tiempo después, Liu y los adultos hablan sobre sus seres queridos, a quienes extrañarán si llegan a morir en guerra. Lucy dice no importarle morir, puesto tuvo una vida plena, aunque Liu está seguro que su abuela no morirá tan pronto, comentando que a él no le interesa tener esposa e hijos.
A la mañana siguiente, los exorcistas se reúnen para conocer el plan de asedio a la fortaleza de Satán. Por un lado, Liu es agrupado en el equipo C, junto a Lucy Yang y otros exorcistas de la Sede de Taiwán, quienes tendrán la tarea de emboscar uno de los tres contrafuertes y hallar el altar en forma de llama el cual, al ser destruido, el corazón de Satán que está flotando en el centro se debilitará y caerá. Con todo listo y en sus posiciones, los exorcistas se dividen y comienzan su movimiento hacia la fortaleza de Satán.

Liu abrumado por el poder de Iblis
Mientras el equipo C se dirige a su destino, Lewin informa a todos los equipos el sacrificio de Osceola Redarm, desanimando a los exorcistas. Liu pregunta a su abuela qué ocurría, puesto que no era propio de ella desanimarse. Lucy señala que la muerte de su amigo fue un duro golpe, además, está tan herida que su vida depende de su talismán. En dado caso de que éste se rompa, moriría al instante. Pese a la revelación, Liu asegura que no morirá y discuten al respecto, como de costumbre. Cuando el equipo C llega al contrafuerte, hallan uno de los altares en forma de llama que deben destruir para completar su objetivo. No obstante, el mismo está siendo custodiado por Iblis, quien los ataca sin descanso. En medio del combate, el valioso talismán que la mantenía con vida a Lucy es destruido, terminando con daños mortales y envuelta en llamas, rostizando su cuerpo por completo. Tras el ataque hacia su abuela, Liu queda en estado de shock y no quiere creer que su abuela esté muerta, puesto se suponía que era alguien inmortal. Cuando Liu y su equipo intentan desafiar a Iblis, ésta los atrapa en su mar de lavas, alegando Liu que su poder es abrumador.

Liu lucha contra Iblis
Eventualmente, el Rey Demonio consigue aniquilar a todos los miembros del equipo C en su mar de lava, jactándose de su hazaña, poder y belleza. Sin embargo, de repente, observa horrorizada como su cuerpo se agrieta, arruga y vuelve viejo, preguntándose qué había sucedido, hasta que descubre que Lucy Yang seguía con vida. La Arc Knight cuenta que su plan era poner a dormir al Rey del Fuego para que tuviera un sueño placentero. Pero, al quedarse sin sus Garras Negras, pidió prestado un par a Liu, aunque, al parecer, no eran lo suficientemente eficaces y, como resultado, la ilusión fue un tanto cruel. Resulta que, antes de ser atacada y supuestamente asesinada, Lucy activó su Comando de Emergencia para levantar una barrera que la protegió de los ataques de fuego, permitiéndole lanzar un hechizo con las Garras Negras que Liu le prestó. Por ende, toda la masacre que el Rey del Fuego causó solo fue una ilusión que vio mientras estaba dormida.
Tras ser engañada, Iblis pierde los nervios y se lanza hacia los exorcistas, al mismo tiempo que su cuerpo continúa desmoronándose, señalando Lucy que el demonio siente miedo. Liu empala su bastón Bo en la cabeza de Iblis y luego la hace estallar con su Explosión de Agua. Dicho ataque hace que el cuerpo del Rey Demonio se derrita poco a poco, dejando al descubierto su corazón. Lucy se acerca a éste y termina engullida por Iblis, aunque adrede, ya que en su interior recita un cántico que la pone a dormir. De este modo, Liu lanza su Gran Cascada, destruyendo así el corazón demoníaco de Iblis.

Liu ante la pérdida de Lucy
Con la derrota del Rey Demonio, Lucy yace en el suelo moribunda, porque el talismán que la mantenía con vida fue destruido en batalla. Mientras los taoístas intentan salvarla, la anciana se dirige a Liu preguntándole por qué no luce feliz, ya que ahora él se volvería el líder de su clan. Brevemente, Liu recuerda su pasado y su encuentro con Lucy, cuyos pasos decidió seguir. Lucy se da cuenta de que Liu tiene miedo de tomar el liderazgo, pero lo anima diciéndole que los cambios son necesarios. Finalmente, con sus últimos alientos, Lucy asegura que hasta los demonios tienen sueños, falleciendo. Mientras los taoístas lamentan la pérdida de su maestra, Liu destruye la antorcha con su bastón Bo, completando así el objetivo del equipo C.
Maister y Habilidades[]
Liu utiliza cánticos para realizar sus exorcismos. Tiene un bastón Bo con el que pelea y parece tener un hechizo sobre él. Cuando recita algo, aparece un gran círculo púrpura en el medio de su bastón y destruye a los demonios. Es un exorcista muy experimentado.
- Explosión de Agua「
水爆炸 Shui bao zha?」 Liu golpea con su bastón al objetivo y luego se posiciona sobre él y, mientras realiza un par de señales con sus manos, recita. Al completar el cántico, el área alrededor de su bastón explota.[1]
- Gran Cascada「
大大瀑布 Dada pubu?」 levantando una mano en el aire mientras apunta su bastón hacia adelante, Liu realiza el cántico correspondiente y luego exclama el nombre de su ataque, haciendo que su bastón se extienda rápidamente hacia el objetivo, atravesándolo. El ataque fue lo suficientemente destructivo como para pulverizar el corazón del Rey Demonio del Fuego, Iblis.[2]
Referencias[]
- ↑ Capítulo 153 (Pág. 22-23)
- ↑ Capítulo 153 (Pág. 28-29)